viernes, 26 de junio de 2009

"Suprise, surprise"

Qué bueno que me sorprendas. Qué bueno que no seas consciente ni te importe en absoluto el mundo de la moda pero que te marques detalles como estos. Qué bueno verte llegar al otro lado de la estación y observar unas magníficas zapatillas casual de Yves Saint Laurent, las cuales seguro que no son ni tuyas, seguro que pertenecen al gran arsenal de hermanos de que dispones. Pues desde aquí te informo de que desde adolescente Yves Mathieu Saint-Laurent devoraba revistas especializadas como Vogue al tiempo que leía a su autor favorito, Marcel Proust. Y de ahí, un provinciano chico decidió dar el salto e irse solo a París a probar suerte y aprender todo acerca del mundo de la alta costura. Y que ese chico con ganas de aprender y con una pasión bien afianzada, que comenzaba de la mano de Christian Dior, fue el creador del Pret a Porter, uno de los diseñadores más innovadores de todos los tiempos, y al que llegaron a denominar "Rey de la moda". Fue el modisto más joven de la alta costura francesa y su primera colección veía la luz en el año 1962, con un estilo personal que revolucionó las pasarelas de todo el mundo. Diseños con clara inspiración masculina que invadían la moda de los 80, con modelos como su clásico esmoquin para mujeres, los vestidos trapecio o las provocativas blusas de seda transparente. Un chico inseguro, con miedo al fracaso como muchos de nosotros, pero que ante la mirada de los demás, al igual que tú, mostraba grandes dosis de personalidad y entusiasmo, que le llevaron a la cúspide del éxito. En unos años me lo cuentas tú a mi y con otro nombre propio de protagonista. GABRIELLE.

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