jueves, 18 de febrero de 2010

"Desencanto en los Goya"

Así es como puedo resumiros, en cuanto a moda se refiere, la gala que se celebró el domingo pasado en su vigésimo cuarta edición. O yo tenía la mirada especialmente crítica o las actrices no terminaron de acertar con los modelos escogidos. Quizá mal asesoradas, quizá empeñadas en vestir importantes firmas que no siempre hacen que ese vestido les quede bien o sea el adecuado. A la super star Penélope, no se le puede negar que fuera impecable de Versace, pero para mi gusto aquel escote no le favorecía especialmente. Pude comprobar que tiene más curvas de lo que parece en pantalla y, aunque no quiero ser mala, solo diré que la tripa se le notaba ligeramente en la parte delantera del vestido. Iba literalmente “enfundada”. Chica Pe, ¡Relajate y disfruta! – me dieron ganas de decirle, de “mujer a mujer"-.
Otra caída en picado, Paz Vega. Después del Hannibal Laguna del año pasado, que eligiera este modelo me pareció más que raro. Ni el peinado le acompañó. ¿Más errores? Belén Rueda. También fiel a su diseñadora de cabecera Carolina Herrera y, aunque el vestido era bonito, el color resultaba antiguo y recargado. Su maquillaje, brillos y brillos. Toda ella brillaba demasiado y el color de pelo rubio casi blanco, le ponía más años. ¡¡Como veis, tengo para todas!!
Resumiré mis favoritos: La impresionante Clara Alonso (el único ángel español de Victoria’Secret) con un lencero nude de Dolce&Gabanna, Emma Suárez ataviada con un sencillo vestido palabra de honor y pedrería, de Armani Priveé o Fanny Gaultier, con un recargado cancán y un atrevido corsé de Caprile… que si lo hubiera llevado Pataky, hubiera sido la bomba, pero en ella pasó mucho más desapercibido.
Me sorprendí y mucho al comprobar que, una vez más, el “acuerdo” al que se había llegado con la Asociación de Creadores de la Moda Española (ACME) para que las invitadas vistieran de modistos españoles, cayó en saco roto. Muy pocas apostaron por ellos. Sí lo hizo la Ministra de Cultura, Ángeles González-Sinde que optó por Amaya Arzuaga, Natalia Verbeke de Antik Batik, Fanny Gautier de Caprile, Bimba Bosé de David Delfín o María Reyes, de Ana Locking. No quiere decir, ni mucho menos, que estos fueran los diseños más bonitos de la noche pero apuesto firmemente por los modistos de nuestro país, que son capaces de ingeniar auténticas maravillas y si no se sienten apoyados muchas veces por el elenco del famoseo, es precisamente por actuaciones como estas. Es mucho más chic llevar un Ninna Ricci que un Alma Aguilar pero me apuesto mi par de zapatos preferido que muchas de las peor vestidas hubieran solventado el tema del vestuario acudiendo al taller de mi diseñadora favorita. ¿Detalles curiosos? El alegrón de Marta Etura y Luis Tosar, que son pareja, y los dos se llevaron casualmente el Goya. Minuto antes de salir al escenario, Pé pide un espejo, no está cómoda con el pelo que le han puesto… La inexplicable presencia por tercer año consecutivo de Yola Berrocal y su insistencia a pasar por photocall, que, educadamente y una vez más, le fue denegado. O el galante gesto de Coronado. La noche era heladora y su representante estaba congelada. Él le cedió la chaqueta, cual caballero de los de antes.
PEGUIE.
Pdta. ¡¡¡Nos vemos en Cibeles!!! ;)

2 comentarios:

Lale dijo...

Mi querida Peguie no deja titere con cabeza!! pero su vista de lince y su capacidad para captar los minuciosos detalles le dan a esta cronica goyesca toda credibilidad.
tq.

Anónimo dijo...

estoy contigo peguie, esperando tanto para esto...en fin, que bueno es saber de primera mano anecdotas que nadie ha visto, si te acuerdas de mas cositas escribe que estaremos expectantes...gracias a las dos!!!XOXO